Una de las cosas que mas disfruto en mi vida es mi profesión, el estar en el aula y tener la oportunidad de dedicar gran parte de mi tiempo a la enseñanza a niños preescolares es altamente gratificante, pero ciertamente hay factores externos que poco a poco van mermando el trabajo que se realiza en preescolar , pero no determinantes claro esta, es sabido que el hogar es el principal transmisor de valores, es el lugar propicio para establecer limites y reglas de convivencia las cuales les servirán para una futura convivencia sana en el mundo exterior y en el jardín de niños, pero la realidad es que cada vez mas son pocos los padres de familia que realmente lo hacen dejando toda responsabilidad sobre esto a la escuela; en la actualidad el concepto de familia se ha vuelto mas amplio, complejo y diverso mostrando una gran variedad de modelos familiares a los cuales los docentes tenemos que aprender a adaptarnos y comunicarnos con ellos, el tener un canal de comunicación eficaz con los padres de familia es uno de aspectos más difíciles de nuestra profesión ya que como docente nos enfrentamos a la critica constante por parte de los padres de familia, a las exigencias de los mismos cuando ellos se deslindan de cualquier responsabilidad educativa con sus hijos , etc. pero a pesar de estos obstáculos mi experiencia como docente me a dejado muchas satisfacciones, aprendizajes y sobre todo reflexiones importantes sobre la vocación y el amor a lo que haces en el aula; y una de esas reflexiones es sobre la importancia de realizar tu labor con entusiasmo, nada fácil cuando constantemente se nos bombardea a los maestros con criticas por parte de la sociedad, un gran desafío sin duda ya que como docentes tenemos que transmitir ese entusiasmo a los niños por un lugar en el cual encuentren aprendizajes de forma interesante y ademas divertida.
Para que los niños se entusiasmen por aprender es necesario que también nosotros, los docentes, nos entusiasmemos con lo que hacemos.
Resignificar nuestra practica, darle un sentido personal a lo que hacemos en el aula ,sin dejarnos influenciar por criticas externas, encontrar aquello que nos entusiasme como docentes para poder motivar a nuestros niños y generar aprendizajes significativos en ellos.
Se dice fácil pero es una tarea difícil ya que no siempre vamos a poder cumplir con los objetivos que nos planeamos, ni vamos a poder siempre cumplir con las expectativas de todos los padres de familia pero estoy segura que si trabajamos Comprometidos en nuestra labor vamos a poder encontrar el verdadero sentido de la enseñanza y por ende vamos a lograr aprendizajes significativos en nuestros alumnos.
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